El arte de elaborar mezcal se remonta a la llegada de los españoles a México hace cinco siglos. Por eso decidimos seguir la tradición de nuestros ancestros minuciosamente y así asegurar que Wahaka siga arraigado en esas costumbres antiguas. Ciertamente hay formas más fáciles de elaborarlo y de hacer concesiones que pasen desapercibidas. Sin embargo, nosotros insistimos en elaborar el mezcal de forma artesanal, como lo hacían nuestros ancestros - cocer las piñas en un horno de tierra, triturarlas con una piedra de molino y fermentarlas en tinas al aire libre. En Wahaka opinamos que, cuando se trata de elaborar un mezcal auténtico, el viejo mundo es el mejor mundo.
Cuando visites nuestro palenque vas a notar algo peculiar, que no hay maquinaria o equipo industrial, nada relacionado a una producción en serie. Que solo hay herramientas, un hacha, una horqueta, unas piedras volcánicas, algo de leña y un caballo. También verás que en el horno hay un alambique de barro calentándose en el fuego. Habrá gente que quizás no entienda la razón por la cual seguimos utilizando un método tan antiguo. Sin embargo, lo que atrae a los amantes del mezcal artesanal, es precisamente la simplicidad de su proceso de elaboración.